Para quienes quieren dejar de fumar, Anteroos dispone de orientación adecuada.  
Los cursos se dictan para grupos de 10 a 20 personas teniendo una duración de 8 reuniones, 
a razón de 2 semanales de 2 horas cada una. El grupo es al principio cerrado y dirigido por 1 coordinador. 
Este coordinador es siempre un fumador que ha conseguido su objetivo de dejar de fumar con la orientación de Anteroos. Quienes asisten a los cursos lo hacen en busca de ayuda, a partir de haber tomado la decisión de dejar de fumar. 
La constitución social de los grupos es completamente diversa, dado el carácter azaroso con que los participantes se anotan. 
La adicción a fumar es independiente de la cultura, factor intelectual y situación social de cada individuo. 
La mecánica de los grupos tiene un objetivo claro: DEJAR DE FUMAR. 
Los interesados recapacitan y maduran a cerca de las causas del tabaquismo y las razones para dejar de fumar. Juntos aprenden un modo para alcanzar el propósito. 

Grupos de ayuda mutua: Para quienes quieren dejar de fumar y no pueden abonar el precio de los cursos anteriormente descriptos, o simplemente prefieren concurrir a un grupo con consignas de trabajo no conductistas, Anteroos ofrece la posibilidad de informar para concurrir a grupos abiertos de ayuda mutua.  
A estos grupos concurren fumadores con el objetivo de dejar de fumar, u otros que simplemente están atraídos en poder ayudar a un familiar o un amigo y concurren para ver que hacemos. El grupo trabaja con lemas muy simples de las cuales no debe desalinearse.

Atención medica personalizada: La adicción a la nicotina es posible vencerla mediante un proceso médico.
Anteroos ofrece profesionales médicos, éstos atenderán a cada fumador que busque un método con drogas específicas. También pueden utilizarse técnicas alternativas como la acupuntura y el uso del "laser". 
Estas últimas también observadas por médicos. 

Un miedo común en quien desea dejar de fumar es el aumento de peso que este proceso puede generar.  
Es por este motivo que uno de los grupos de autoayuda del Centro Anteroos esta orientado a trabajar sobre este miedo, para que este no se convierta en la razón para seguir fumando. Dentro de este grupo serán aceptadas personas no fumadoras, que deseen aprender a llevar una buena alimentación. 

¿Por qué conviene dejar de fumar tabaco?  

Porque si usted se encuentra leyendo esto, es porque tiene la suficiente convicción para dejar esta adicción, y lo único que necesita es fortalecer esta convicción a través de intervenciones psicosociales, físicas y farmacológicas. (Más información: que redirija a "consecuencias del fumar sobre la salud")

Para dejar de fumar es imprescindible tener la decisión firme de hacerlo y de enfrentar el síndrome de abstinencia de la adicción. Es necesario vencer la adicción psicológica y gestual. Ahora bien la convicción no es suficiente: es importante someterse a los lineamientos del tratamiento y el apoyo de los participantesy profesionales que asesoran.

Tratamiento integral:
El  tratamiento fue creado con una perspectiva interdisciplinaria centrando su atención en la información brindada por las investigaciones estadísticas para optimizar el éxito de las mismas.

Descripción del tratamiento:
1) El tratamiento dura 6 semanas, 4 antes de dejar de fumar y 2 después. Los encuentros son semanales.
2) Dado que el 90 % de las personas que comienzan su abstinencia, vuelven a fumar dentro de los 6 meses siguientes, el tratamiento incluye un seguimiento para impedir abandonar los logros de la terapia.   

Lo cierto es que el tabaco es capaz de generar una dependencia entre moderada y severa. No es cierta la opinión popular que el consumo de tabaco es menos perjudicial para la salud que otras drogas. En realidad los registros muestran que el tabaquismo enferma y mata más gente que las otras drogas con el costo económico que ello conlleva. 
Los impedimentos para dejar de fumar tienen una triple causal:
1) Gestual, 2) física y 3) psíquica.  

La relación gestual surge del hecho del acto repetitivo que es sacar, encender, inspirar, exhalar.

El segundo componente es La relación física. Cuando un sujeto incorpora al organismo durante un tiempo una sustancia capaz de generar adicción como es el caso de la nicotinatermina por generar una dependencia física cuya principal característica es la necesidad de incorporar la sustancia al cuerpo en espacios de tiempo más o menos regulares.

Causal Psíquica: el cigarrillo suele estar velando, haciendo "humo'' varios conflictos internos que lo llevan a remplazar vínculos o soportes emocionales con el cigarrillo, entre otras cosas.

Mitos (falsos y verdaderos)

Sólo se necesita fuerza de voluntad para dejar el cigarrillo.
Podemos entender que la fuerza de voluntad es importante pero sola no es suficiente. Es la creencia en que en base a nuestras habilidades podemos cambiar.

La contaminación ambiental es más peligrosa que fumar.
Las investigaciones señalan que el tabaco es causante del 30% de todos los tipos de cáncer, mientras que la contaminación ambiental sólo de un 2%. 

Traté de todo y nada funciona.
Así como una medicación necesita que se tome con cierta frecuencia y en ciertas dosis, los cambios psicológicos también requieren estas condiciones.
Por esto se requiere determinar cuándo, cuánto y por cuánto tiempo debe ser aplicado cada proceso para que pueda ser efectivo.

Un cigarrillo en la mano aumenta mi atractivo, da estilo. 
El fumar, es considerado por la mayoría de las personas –incluso los fumadores– como una conducta insana, molesta y perjudicial. Las nociones de atractivo y estilo son variables con el tiempo y los contextos sociales.

Sólo fumo cigarrillos bajos en nicotina y alquitrán, no hacen tan mal.
Las personas que fuman este tipo de cigarrillos inhalan más a menudo o más profundamente para compensar el contenido bajo de nicotina en sus cigarrillos, y al mismo tiempo absorben más cantidad de otras elementos tóxicos.

Este no es buen momento para dejarlo. 
Dejar de fumar requiere tiempo, esfuerzo, así que conviene planificar bien el momento de dejarlo y prepararse, es deseable que se haga con asistencia de expertos.  

La gente en realidad no cambia.
Cree que si no lo logró en ese momento no lo logrará. Es bueno saber que toma más de un intento dejar de fumar. El éxito se logra con continuidad y luego de esforzarse.

La vida sin fumar será muy triste.  
Es una señal que indica hasta qué punto el tabaco ha llegado a formar parte de su vida. Más triste es, desde luego, enfermar seriamente por causa del tabaco o morir tempranamente. El paso de dejar de fumar agrega estrategias que auxilian a buscar significado a las pequeñas cosas de la vida de todos los días. 

Como no fumo mucho, no me perjudica. 
La única cantidad de tabaco que se puede tomar sin que afecte a la salud es cero. No es cierto que fumando poco se evite los riesgos. Sí es verdad que el peligro de padecer enfermedades causadas por el tabaco se incrementa al aumentar el número de cigarrillos fumados, lo cual no implica que exista una cifra mínima recomendable. 

Para conseguir relajarme tengo que fumar 
El fumador ha aprendido a emplear el cigarrillo como ayuda para enfrentar las realidades tensas de cada día. Al dejar de fumar es útil aprender a relajarse sin esgrimir el cigarrillo. Un programa de tratamiento adecuado puede ayudar a este propósito...  

Llevo muchos años fumando y el daño ya está hecho, ¿para qué dejarlo ahora?  
Los peligros de la mayoría de las enfermedades se reducen casi por completo entre los cinco y diez años desde que se consigue la abstinencia. Pasado este periodo, los riesgos se equiparan prácticamente a los de una persona que nunca ha fumado.

Si dejo de fumar, ¿engordaré? 
Solamente un tercio de ex los fumadores gana peso. Otro tercio se mantiene como estaba. La  posibilidad de aumento se puede prevenir haciendo una dieta equilibrada. Y eso es más saludable que seguir fumando. 

Fumar me ayuda a relacionarme con los demás. 
El proceso de abandono del tabaco implica apoyos y recomendaciones para vincularse con las demás personas sin la necesidad del tabaco. 


Tengo una gran dependencia física imposible de vencer. 
No es fácil superarla, y a veces necesita ayuda profesional y medicación para superar el síndrome de abstinencia. La dependencia física es lo primero que se soluciona en un proceso de abandono del tabaco, siendo más costoso el trato de la dependencia psicológica. Es difícil, mas no imposible y el esfuerzo de intentarlo. 

Mi abuelo vivió más de 90 años muy sano y fumando. 
Su abuelo tuvo suerte. Además, en épocas anteriores, la frecuencia con que se fumaba y la propia presentación comercial del tabaco, hacía que el consumo diario fuera menor que ahora. Lo cierto es que cuanto más fuma una persona, crece su riesgo de padecer y morir precozmente a causa del tabaquismo. 

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